Aylanz plantea una forma única de vivir un lugar diferente: sin prisa, sin artificios y en armonía. Un lugar donde volver a conectar con nosotros mismos, con el territorio y con la cultura local. Nuestros alojamientos y experiencias nacen del territorio y se funden con él, generando sinergias con el entorno y la comunidad a través de la gastronomía, la cultura, el arte, el deporte y el wellness.
Gracias a su arquitectura bioclimática y a un diseño y gestión que respeta el entorno y la comunidad, este hotel boutique es el primer alojamiento del mundo con el sello Biosphere Responsible Tourism. Con la mirada abierta al Atlántico, vistas a Fuerteventura y una amplia selección de suites, La Isla y el Mar ofrece una experiencia tan única como el lugar donde se encuentra.
Ubicadas en lugares privilegiados de la isla, estas villas ofrecen la tranquilidad de un hogar y el cuidado de un servicio cinco estrellas. Un refugio de jardines y terrazas abiertas al cielo, con piscinas privadas que invitan a la pausa.
Diseño minimalista, integración total en el paisaje y una forma de habitar la isla que respeta su esencia. Discretas, luminosas y serenas, las Villas Elements son un lugar donde menos es mucho más.
Coronando un imponente acantilado, rodeada de arena volcánica y con acceso directo al océano, esta villa tiene una armonía propia esculpida por el terreno que la rodea.
Gracias a su arquitectura bioclimática y a un diseño y gestión que respeta el entorno y la comunidad, este hotel boutique es el primer alojamiento del mundo con el sello Biosphere Responsible Tourism. Con la mirada abierta al Atlántico, vistas a Fuerteventura y una amplia selección de suites, La Isla y el Mar ofrece una experiencia tan única como el lugar donde se encuentra.
Ubicadas en lugares privilegiados de la isla, estas villas ofrecen la tranquilidad de un hogar y el cuidado de un servicio cinco estrellas. Un refugio de jardines y terrazas abiertas al cielo, con piscinas privadas que invitan a la pausa.
Diseño minimalista, integración total en el paisaje y una forma de habitar la isla que respeta su esencia. Discretas, luminosas y serenas, las Villas Elements son un lugar donde menos es mucho más.
Coronando un imponente acantilado, rodeada de arena volcánica y con acceso directo al océano, esta villa tiene una armonía propia esculpida por el terreno que la rodea.
Cada rincón de este paisaje de piedra volcánica, a medio camino entre continentes, es testimonio de la historia y la cultura de un lugar que nació de la lava y extiende su huella mucho más allá de los límites que dibuja el océano Atlántico.
Diseñado por Ron Kirby, este campo abraza la irregularidad del terreno volcánico y conserva los elementos originales del paisaje. Las vistas panorámicas al Atlántico y a Lanzarote dibujan un recorrido técnico y evocador.
Kentia y La Honorable proponen una experiencia gastronómica profundamente sensorial, combinando cocina de autor y producto local seleccionado directamente de los cultivos de la isla. Una cocina conectada con la tierra, con los ritmos de la agricultura local y con quienes la hacen posible.
Diseñado por Ron Kirby, este campo abraza la irregularidad del terreno volcánico y conserva los elementos originales del paisaje. Las vistas panorámicas al Atlántico y a Lanzarote dibujan un recorrido técnico y evocador.
Kentia y La Honorable proponen una experiencia gastronómica profundamente sensorial, combinando cocina de autor y producto local seleccionado directamente de los cultivos de la isla. Una cocina conectada con la tierra, con los ritmos de la agricultura local y con quienes la hacen posible.
La huella es más importante que el destino — la que dejas aquí y la que se va contigo. El desarrollo y el respeto al entorno natural y a la comunidad local no solo pueden coexistir, deben hacerlo.
